ARGENTINA

El 21 de septiembre de 1989, hace 32 años, de la mano de Eduardo Carletti y un reducido número de colaboradores, empezó una loca aventura llamada Axxón. Compilando assembler y Turbo Pascal para DOS apareció un singular programa con texto y gráficos que prometía acceso gratuito a la ciencia ficción que muchos anhelábamos leer pero no teníamos cómo. A pulmón, entre amigos, nació un ejemplar de lo que en las primeras épocas Rodolfo Contin bautizó «bitlo», pensando en acuñar un término propio para algo que el mundo anglohablante, que nunca nos pide nuestra opinión, ha bautizado como ebook.

Del copiado artesanal en soportes ya inexistentes, a la descarga de sitios FTP misteriosos y BBS pasados de boca en boca, a una época en la que al menos una de estas dos siglas ya es obsoleta y la otra se conoce poco, y Axxón tiene un sitio con su nombre, guardando sus 32 años de historia y las variadas iniciativas que fueron asomándose entre sus páginas virtuales.

Lejos están las épocas donde hacíamos cola en un negocio de shareware para copiarnos el disquete con el último número, con una interfaz distinta de todas las conocidas porque se había inventado desde cero. Antes de que las interfaces gráficas y los estándares multimediáticos estuviesen al alcance de todos, Eduardo Carletti se quemaba las pestañas para agregar imágenes, animaciones y sonidos en las primitivas PCs de los ’90, y Rodolfo Contin animaba tapas memorables donde el azar y las matemáticas se daban la mano para crear maravillas.

Hoy somos más estándares y menos artesanales, pero Axxón sigue llevando ciencia ficción, fantasía y terror «a donde usted la lleve». En su sitio, así como en formato de ebook (o de bitlo, si quieren), abriendo puertas a las voces en castellano.

A nuestro paso, seguimos estando. Ojalá quieran seguir acompañándonos mientras sigamos aquí.